ENTREVISTA AL EGRESADO DESTACADO

Nacida y criada en Antofagasta, hija de profesores normalistas y  segunda de 3 hermanas. Vivió una niñez tranquila y feliz. Hija de la educación pública, estudió en la escuela E-87 de las rocas hasta octavo básico donde su madre era profesora, para después ingresar al Liceo de Niñas donde se licenció de 4 medio. Enfermera de profesión, egresada de esta casa de estudios, magister en salud pública de la Universidad de Chile. Con una larga trayectoria en el servicio público, primero como enfermera y luego en cargos de gestión, la egresada destacad de la Facultad de Ciencias de la Salud es la Directora de Atención Primaria del Servicio de Salud de Antofagasta, Verónica Chicaguala Velázquez.

1.- ¿Qué es lo que la motivó, luego de salir de 4 medio a estudiar enfermería?

VC: El haber estado criada bajo el alero de profesores, tanto por mis padres, tíos y primos, quería estudiar pedagogía. Pero cuando uno está en cuarto medio, comienzas las charlas vocacionales y ahí me empezó a interesar el área de la salud, principalmente las carreras de enfermería y obstetricia. Luego de dar la Prueba de aptitud académica (PAA), me decidí por el área de salud y específicamente por la carrera de enfermería.

2.- ¿Cómo fue su tránsito en la universidad desde el punto de vista académico una vez que ingresó?

VC: La verdad es que al comienzo me costó. Yo era de buenas notas en el liceo, no tenía dificultades familiares así que mi única responsabilidad era estudiar y me iba bien con lo básico en dedicación, pero al ingresar me costó tomarle el pulso al ritmo de la universidad. Me dificultó el hecho de no tener un hábito estricto de estudio así que después de esto comencé a establecer horas de dedicación para estudiar cómo se debe y mejoré mucho. Cuando ya tomé los ramos propios de la carrera me fue muy bien y le tomé el gusto a la carrera, disfruté el hecho de sentarme a estudiar. Debo decir que fue de menos a más.

3.- ¿Hubo asignaturas que resultaran complejas en tu paso por la universidad?

VC: Al comienzo todo lo de enfermería, la práctica, la pasada hospitalaria. En esos tiempos hace casi 20 años la Universidad de Antofagasta era la única carrera del área de la salud, entonces teníamos casi todo el campus para nosotros, lo mismo el hospital. Así que en ese sentido nada que decir. El ramo de bioquímica fue mi gran prueba de fuego, me costó muchísimo hasta que pude lograr aprobar el ramo, así que me dije a mi misma que si pasé ese ramo, podía pasar todo.

4.- ¿Qué recuerdos tiene la universidad en su formación y como influyó en su labor profesional?

VC: Fuera de los ramos académicos propiamente tal, hubo áreas y docentes que influyeron en lo que a la larga me dediqué. Me gustó desde un comienzo el área de la salud pública y atención primaria que es a lo que me he dedicado desde hace 20 años.  Creo que la forma y entrega de los conocimientos, más allá de lo teórico, influyó en mi gusto por esta línea. Independiente de que cuando uno egresa está dispuesta a trabajar donde sea para adquirir experiencia, pero el área de la salud pública me gustó mucho por la influencia de ciertos profesores, que yo veía que entregaban sus conocimientos más allá de lo que un docente da, sino a través de su gusto y alegría, aquello de sentirse gozoso por trabajar en esta área. Entonces la Universidad de Antofagasta, fue importante para definir mi carrera dedicada al servicio público.

5.- ¿Cómo ha sido su trayectoria laboral, una vez que egresó de la universidad?

VC: Desde que egresé he trabajado los más de 20 años, en el sistema público y sus redes. Primero partí en el hospital de Tocopilla, gracias a un programa que creó el Ministerio de Salud, para trabajar en centros que no estaban en las grandes ciudades. Postulé y finalmente quedé. Ahí partí mis primeros años como enfermera asistencial en el área de atención primaria para infantes. Esa fue mi primera experiencia. Tuve la suerte que el Ministerio de Salud ofrecía magister a quienes estaban en estos programas y en esos años, eran de modalidad presenciales por lo que partí a Santiago a hacer el master en Salud Pública en la Universidad de Chile. Con esto le tomé aún más el gusto a trabajar a la salud pública, al hacer un magister y tener una mirada más macro y de políticas públicas. De vuelta del master me presento ante mi empleador y me señala que no vuelvo a Tocopilla, sino me quedo en el Servicio de Salud que es donde me desempeño desde hace 15 años.

6.- ¿Qué importancia le atribuye en la formación de profesionales de la salud la formación integral y el desarrollo de las mal llamadas habilidades blandas?

VC: Me parece de gran importancia puesto que nos encontramos en un mundo donde necesitamos de otras habilidades además de las netamente disciplinares para trabajar con la sociedad y la salud en general.  No basta tener ese autoritarismo sanitario de antaño en el cual uno iba a la casa y daba el mandato de lo que tenía que hacer, que era un tema mucho más de imponer las cosas sin tomar la opinión del usuario que a lo mejor estaba internado en un hospital, sin llegar a analizar porque tenía ciertas conductas. Hoy en día estamos ante nuevas patologías que son las enfermedades crónicas, las enfermedades de salud mental. Al contrario de lo que pasaba hace 40 o 30 años en las cuales las principales causas de muerte eran las enfermedades infecciosas en donde se ocupaba un trato muy autoritario ya que había que hacer esto y aquello porque estaba en juego la vida o la muerte, entonces, el paradigma cambió. Por ejemplo, los infartos están apareciendo en los hombres y mujeres a los 30 años, por lo tanto, decirle a una persona de esa edad: “cambié sus hábitos alimenticios y de vida, deje de fumar y haga deporte”, desde un escritorio ya no funciona, se necesitan otras habilidades para poder comunicar estos diagnósticos y ver que cada persona tiene una historia propia que no se puede homologar a los demás.   Hay un sinfín de factores que ameritan que el área de la salud que se ha caracterizado de tener buenas bases en lo teórico y disciplinar tengan algún tipo de formación en la llegada a la persona, en el trabajo comunitario. Poder llegar a la gente con otra llegada porque ellos tienen opinión, existe el internet y saben de lo que uno habla a grandes rasgos. Por lo tanto, se requiere de esa mirada en la formación integral.

7.- ¿Qué consejo les daría a las futuras enfermas de la universidad?

VC: fuera de decir que es una carrera muy hermosa, es una profesión donde uno puede aportar, y no centrarse en un solo ámbito reducido de la salud que es el que a mayoría conoce. Explorar otras áreas, por ejemplo, la docencia, la investigación, hacer cosas y no quedarse con lo que uno ya obtuvo, seguir estudiando y lo que es muy importante, siempre aprender a escuchar, no por el hecho de ser profesional imponer mi posición o pretender saber más que los demás. Escuchar al paciente y tener paciencia. Es muy relevante este aspecto pues en conjunto se encuentra la solución a aquello que le aqueja, también y para las nuevas generaciones, dejar el celular al lado cuando estén atendiendo porque eso los pacientes lo resienten.