Danza y expresión corporal, un camino para la felicidad plena.

“Hay que romper el mito que se necesita un cuerpo delgado para bailar. Los seres humanos llevamos la danza en el interior, es parte de nuestra vida cotidiana”.

“Sí dedicamos tiempo específicamente al cuerpo, nuestro desarrollo y expresión corporal, realmente podemos lograr la felicidad en plenitud”

Así define su actividad la encargada del taller de “Salsa y bailes latinos”, dependiente del Programa de Extensión Educativa de nuestra Universidad, Natalia Olguín Moya, explicando que la idea del curso que dirige,  es lograr que las personas puedan aprender a bailar la Salsa y diversos bailes, como la Bachata, el Merengue y la Zamba, aprendiendo los pasos básicos, la cadencia de los movimientos, puedan tener una mejor percepción rítmica.

“La mayoría de las veces las personas bailan, pero lo hacen fuera de tiempo, la idea del curso es que lo hagan de la manera correcta y disfruten rompiendo la rutina”.

Junto a esto,  Natalia, comenta que lo importante es fortalecer la musculatura de las piernas, para que el cuerpo permita moverse con comodidad.

El taller dio inicio en abril de este 2016 y tiene a su haber tres ciclos, los que fueron impartidos en los periodos de otoño, invierno y primavera y sus clases son realizadas todos los sábado desde las 18:30 a las 20:00 horas.

Experiencia.

Al finalizar cabe destacar que la directora del taller, Natalia Olguín, cuenta con una amplia experiencia en el área de la danza. Sus inicios se remontan a la temprana edad de 4 años, en la actualidad tiene 27, época en la que participó de la academia de baile de la coreógrafa Karen Connolly, tomando clases de Tap y Danza Moderna.

Posterior a esto, y ya en su adolescencia, desarrollo perfeccionamiento de mayor profundidad  estudiando Danza Contemporánea y Ballet, para profesionalizarse en la Universidad Arcis, titulándose como pedagoga e intérprete en danza.