Una científica de lujo visitó la UA
Tamara Awerbuch, desarrolló una serie de clases en la Universidad de Antofagasta donde compartió sus conocimientos con alumnos y académicos de la Facultad de Ciencias del Mar.
Tamara Awerbuch-Friedlander manifestó su alegría por entregar parte de sus conocimientos en la UA.
Tamara Eugenia Awerbuch-Friedlander, es uruguaya de nacimiento, domina mejor el hebreo y su mayor parte de adolescencia la vivió en Israel. Luego se trasladó hasta Estado Unidos donde se graduó como científica y biomatemática en salud pública de la Escuela de Harvard de Salud Pública en Boston, Massachusetts.
Durante tres semanas, Tamara conoció y logró desarrollar una serie de actividades en la Universidad de Antofagasta gracias a una “Beca Fulbright” que otorga el gobierno norteamericano y que es entregada a científicos de primer orden con la finalidad de colaborar con profesionales, académicos y estudiantes de otros lugares del mundo.
La científica esta vez tuvo como objetivo en su visita, enseñar las ciencias del ambiente y la epidemiología a través de modelos matemáticos, proceso que involucra una serie de evaluaciones y estudios que no todos llegan a entender fácilmente.
“Me pidieron que viniera hasta la Universidad de Antofagasta, esta es mi quinta vez que visito la ciudad, y realmente la encuentro muy hermosa. Me gusta escapar del intenso frío que hace en Bostón y el clima en Antofagasta es ideal, me encanta”.
“Mi pasión es dar clases y allá en EE.UU. tengo muy pocas horas para ejercer la docencia. Afortunadamente aquí fueron muchas horas en las que tuve la oportunidad de enseñar modelos matemáticos en ecología y salud pública”, afirmó la profesional.
En la mayor parte de sus investigaciones, Tamara, utiliza modelos matemáticos que relacionan los diferentes factores que intervienen, en los sistemas que se prestan a análisis cualitativo y cuantitativo. Ello le ha permitido publicar un sin número de textos y publicaciones ligadas a este tipo de materias.
¿Cómo se gestó su invitación hasta la Universidad de Antofagasta?
Fue un proceso un poco largo, que involucra recomendaciones y muchos estudios, pero debo decir que fue en la misma universidad de Harvard y gracias a conversaciones que sostuve con algunos académicos, es que pude formarme la idea de hacer algunas clases y seminarios en la UA. Todas estas clases fueron orientadas a estudiantes de doctorado, magíster e incluso de pregrado de la Facultad de Ciencias del Mar.
¿Cómo se llega a combinar la matemática y ecología?
Hay mucha complejidad entre ambas cosas. Por ejemplo muchos no sabemos ¿Cómo los peces se enferman? o ¿Cómo se desarrollan y propagan ese tipo de enfermedades?, además que ocurre con el control en las pesquerías y todo lo que tenga que ver con el sistema ecológico marino. Para ello surge la matemática, que resuelve este tipo de preguntas a través de ecuaciones y modelos que permiten entender desde otro punto de vista estas materias y por ahora estoy trabajando en una publicación donde, por una parte, se estudia la conciencia aplicada al control de una enfermedad y, por otra, la inconciencia que se tiene en la explotación de los recursos. ¿Suena complejo no?
¿Desde cuándo se ha dedicado a la docencia?
Siempre he estado ligada a la docencia y enseñar parte de mis conocimientos, eso es lo que trato de hacer en todos los lugares que visito y espero dejar en la UA un poco de ello.
