
Entrevista a egresados destacados
Hijo de una profesora, es el menor de 3 hijos con dos hermanas ingenieras. Llegado a la ciudad el año 92 y alumno egresado del Liceo de Hombres y luego titulado como Administrador Público por la Universidad de Antofagasta. Tiene el record de ser el Secretario Regional Ministerial más joven de la Historia del país al ser SEREMI del Instituto Nacional de la Juventud (INJUV) durante el gobierno del Presidente Ricardo Lagos. Actualmente Consejero Regional. Definido a si mismo como un hombre que ha salido adelante y ha conseguido las cosas gracias a su humildad y esfuerzo personal, El egresado destacado de esta edición es Luis Capioglio.
¿Cómo fue su experiencia de estudiar en la Universidad de Antofagasta?
La universidad es como un semillero, te entrega muchas posibilidades de acuerdo a lo que vayas buscando. Por ejemplo tenía compañeros que eran muy flojos que no aprovechaban la oportunidad, y otros que tenían mucha inquietud y siempre estaban averiguando y tratando de mejorar. En mi caso, desde el primer año, opté por el tema del liderazgo, fui presidente de la carrera en el 1 año, lo que me permitió organizar un congreso, esto me llevó a conocer alumnos de todo Chile, a vincularme con los dirigentes de la carrera de otras universidades del país, y con eso uno va construyendo redes, entonces, además de todo el conocimiento que me entrego la Universidad, me permitió ir construyendo redes de contacto. Entonces para mí la universidad, fue una oportunidad de tener conocimiento y además de vincularme con otra gente que era como yo de todo el país, y eso hasta el día de hoy. De esos tiempos tengo compañeros que son subsecretarios, consejeros, intendentes. Entonces creo que efectivamente, la labor de la universidad en mi caso, al menos, funciono perfectamente. Yo estoy súper contento de la posibilidad de ser profesional, y sobre todo de la Universidad de Antofagasta. Porque mucha gente dice: voy a estudiar a Santiago, pero yo no podía por un tema económico y la Universidad me entregó en la ciudad, en la región donde vivía, todas las herramientas para poder desenvolverme y trabajar.
¿De qué manera influyó la Universidad en su quehacer profesional y político, siendo usted una figura relevante en este sentido?, se sabe por ejemplo que es el SEREMI más joven de la historia del país
R: Tengo varios triunfos y records. Fui el primer Director del INJUV y primer Director Regional con 21 años, como yo no estaba titulado porque estaba en cuarto año, mi decreto tuvo que firmarlo el presidente, y ya que faltaba ese documento, que era el título profesional, entonces la única autoridad del país que podía emitir ese decreto era la máxima autoridad que era el Presidente de la República de ese entonces, don Ricardo Lagos. Yo aún tengo ese documento, porque son pequeños trofeos que a uno le van quedando. Después fui Consejero Regional, Concejal, hoy día soy Consejero Regional, Electo con la segunda mayoría detrás de Gonzalo Dantagnan, sacando una buena votación, y yo creo que mucho de los que apoyaron mi candidatura fueron alumnos de mi universidad o profesores y eso tiene que ver con que eso se ha desarrollado al alero de la Universidad de Antofagasta.
¿Qué Herramientas le entregó en ese sentido la Universidad para su formación?
R: De partida, Profesional, cuando me dicen ¿usted qué es?, yo no digo, “soy político”, soy administrador público, y siempre trato de marcar esa diferencia, yo soy un profesional que claramente tengo una convicción política pero lo profesional me lo entregó la Universidad, por ejemplo los conocimientos en gestión. Las transformaciones que hemos logrado en salud en los últimos 7 u 8 años, pero además en mi trabajo como consejero regional he logrado generar cambios con los procesos administrativos en inversiones, y son herramientas que aprendí en la Universidad con muy buenos profesores.
Los momentos más complejos que vivió en la Universidad, ¿cómo lo hizo para poder superarlos?
R: Yo me atrasé un año por el ramo de estadística, fue súper complejo, yo en verdad no entendía de lo que me estaban hablando, hoy en día lo tengo muy bien asimilado pero en ese momento no entendía absolutamente nada, estaba bloqueado, la verdad me costó mucho, primero le pedí ayuda a mis hermanas, luego cuando no me resultaba acudía a los profesores. Ellos tenían la voluntad después de las clases de explicarme en sus oficinas. Pero estadística me costó muchísimo, porque no entendía, hasta que lo logré con mucha dedicación. Es uno de los ramos que más he estudiado y tuve que dar todo para poder pasar. En general con mucho esfuerzo y sacrificio. Yo no fui un alumno brillante de notas siete o seis en la universidad, yo andaba por los cincos, llegaba con mucho esfuerzo a clases pues yo trabajaba durante el día, salía a las 18:00 horas y después a clases en la modalidad vespertina. Fuera de eso tenías las obligaciones propias de dirigente de la carrera y la federación. Pero no era mal alumno, era de los que opinaban, propiciaba la discusión y el intercambio de ideas y eso favorecía harto las cátedras de los profesores, pues a ellos le interesaban las opiniones distintas, porque básicamente eso es la universidad.
¿Cuáles fueron sus momentos más gratos en la Universidad?
R: Cuando di mi examen de grado, estaba mi mamá y mi señora esperándome afuera y nos fundimos en una abrazo muy especial. Para uno que le tocó trabajar y estudiar, no fue sencillo, ese hito de titularme con un buen resultado fue algo muy especial. También en la Universidad cuando generamos un proyecto que era un centro de estudios públicos, entre alumnos de tercero, cuarto y quinto año, y logramos generar vario documentos de interés regional y hasta el día de hoy todavía andan dando vuelta. Esas fueron cosas que aprendimos en la Universidad, además de las clases, y que entendíamos que el rol de los centros de estudios públicos en la región era generar discusión y eso es algo que después de 10 años de haber egresado veo la carencia de estos organismos aun, y a mí me tocó financiar ese proyecto para la universidad. Convencer al rector, y hoy en día, está en pañales, avanzando creándose, entonces uno de los momentos más fuertes de mi vida universitaria fueron esos, la oportunidad que yo tuve de contactarme con los ciudadanos. Nosotros nos somos una carrera de muchas prácticas, tenemos sólo una al final, pero si yo entendía que debíamos contribuir, siempre vinculado con lo real y concreto.
¿Qué mensaje les darías a los estudiantes que están pasando por momentos delicados en estos momentos de acuerdo a la experiencia que tuvo?
R: Yo creo que la vida no es fácil, a uno le va a tocar pasar por dificultades, a veces te demoras, o tienes problemas familiares, pero fundamentalmente, el esfuerzo cuando uno lo ve después vale la pena absolutamente. Tienen que cerrar los ojos, salir para adelante, y ponerle empeño, y dejar de lado, por ejemplo, de tener un celular mejor, que quiero ganar plata, etc., y esforzarse por que la Universidad en la región entrega y transforma realidades, esta es una de las pocas universidades del país que logra la movilidad social, nuestros alumnos son de clase media baja, y después de haber pasado por esta universidad les permite tener una vida distinta, darles más oportunidades a sus familias a ellos mismos, seguir estudiando, lograr mejor educación para sus hijos, entonces en definitiva, el paso por la Universidad es sacrificado, pero vale la pena enormemente.