Académico de Enfermería participó en Congreso Internacional
Fabio Iribarren académico instructor del departamento de Enfermería de la UA presentó trabajo “Trazabilidad de logros a través de examen clínico objetivo estructurado/simulación” en el Congreso Internacional de Enfermería realizado en Santiago.
Las salas de alta fidelidad de la UA cuentan con cámaras que permiten al docente monitorear desde fuera, el procedimiento del estudiante, ante una situación médica casi real.
El coordinador para la Simulación Clínica de la Facultad de Ciencias de la Salud -FACSA- Fabio Iribarren, participó en la ´’ultima versión del Congreso Internacional de Enfermería organizado por el Colegio de Enfermeras de Chile. En la jornada Iribarren presentó su trabajo desarrollado para el Diplomado en Docencia para la Simulación Clínica, como parte de una de las líneas de investigación del Congreso relacionadas a la seguridad del paciente.
El trabajo de Iribarren fue realizado en conjunto con la Dra. Eliana Escudero Directora de la Escuela de Enfermería de la Universidad Finis Terrae, en el marco del convenio docente que esa institución sostiene con la Universidad de Antofagasta, para investigación y capacitaciones en conjunto.
La investigación de Iribarren dio a conocer la labor docente para la seguridad del paciente, a través de la elaboración de un instrumento de medición de competencias denominado ECOE/SIMULACION, con el que los investigadores crearon escenarios de evaluación que tenían que tener una concordancia con el programa y el currículo, “” y como esto nos aportaba a la seguridad de que los estudiantes obtuvieron el conocimiento y las competencias a través de ese elemento de evaluación”, agregó Iribarren.
Simulación Clínica
Según explicó Fabio el beneficio de la educación por simulación clínica en los estudiantes significa ventajas en la mejora de habilidades,” ellos se entrenan en un ambiente simulado muy cercano a la realidad”. Para esto FACSA cuenta con dos salas de alta fidelidad que otorga al estudiante, un ambiente terapéutico similar a una sala de urgencia, con simuladores que son capaces de generar pulso, convulsiones, presentar heridas sangrantes, con lo que técnicamente los docentes aumentan el ” realismo” del caso clínico que enfrentan los futuros profesionales.
Otra de las ventajas dijo el académico es que logran introducir al estudiante en un ambiente casi real,” lo que genera que sienta la experiencia de actuar en una situación en crisis y maneje la angustia, miedo, y adrenalina. Por lo tanto cualquier error que puedan cometer en la práctica lo pueden prever con la simulación clínica, para que en esas condiciones aprenda de su error”.
Iribarren además está trabajando en una encuesta de satisfacción sobre la metodología de la simulación clínica en alumnos de quinto año de las carreras del área de la salud. Según dijo se observo una mejora en cuanto a la tecnología usada hasta el año pasado”, ahora contamos con cámaras dentro del escenario, lo que influye en el comportamiento del estudiante”. En las observaciones, explicó el docente, los estudiantes destacaron tres puntos importantes como la seguridad, confianza y las ganas de seguir aprendiendo que les genera esta innovadora metodología, ya en base a sus errores, pueden rectificar procedimientos y mejorar, generando así un ambiente seguro.” Que no exista ningún factor punitivo, ya que el rol del docente es ser un facilitador para que el estudiante mejore sus debilidades y aumente sus fortalezas. Esta tendencia en el Departamento de Enfermería se enmarca dentro del Proyecto Institucional de la UA, en la educación basada en competencias, con el estudiante como centro”, agregó Fabio.
Este es el tercer año que Enfermería lleva adelante la iniciativa,” con el 90% del personal de planta capacitado en educación en Simulación Clínica Básica y Avanzada, dos docentes instructores, y con la capacitación como arma principal, que nos permite ver cambios significativos en el estudiante, y en el equipo de trabajo a través de una socialización de los objetivos de aprendizaje para mantener una continuidad en el curriculo”, destacó.
Esta técnica de alta fidelidad sitúa al futuro profesional en un ambiente cercano a la realidad. Aumenta el nivel de seguridad y confianza al momento de enfrentarse a la práctica clínica, además de fortalecer habilidades como liderazgo, técnicas, procedimientos y pensamiento crítico. etc.” Esta metodología permite integrar la teoría con la práctica lo que conlleva a un aprendizaje continuo y significativo”, concluyó Iribarren.
